Tengo una cierta obsesión por el asunto de los corredores, y veo que es una polémica que no cesa. Estos dias que hablamos de rescates a España, o de crédito blando, y no sabemos muy bien quién le está haciendo un favor a quién, llama la atención como nos exponemos a hacer el ridículo frente a Europa, y como levantamos sospechas de poco o nulo rigor.
La semana pasada nuestra ministra de Fomento, Doña Ana Pastor, defendió el Corredor Mediterráneo en Barcelona el martes, y el miércoles en Badajoz defendió el Corredor Central. A falta de leer con luz y taquígrafos sus declaraciones en ambos lugares, esta falta de concreción produce estupor en los nuestros y una enorme falta de confianza en nuestros socios europeos, que estoy seguro que no se acaban de creer lo que leen o escuchan.
El amigo Sim Kallas, que de tanto citarlo ya le tengo una cierta simpatía, estará harto que a pesar que la Comisión Europea haya declarado prioritario el Corredor Mediterráneo, desde España y desde el Ministerio de Fomento se siga coqueteando, jugando y mareando a todas las partes. Hubo una fase de petición, estudio y análisis. Hubo una decisión. Y ahora hay que acatarla, máxime cuando una gran parte de los fondos vendrá de Europa.
En las televisiones europeas se regocijan pasando una vez y otra imágenes de las infraestructuras poco o nada útiles, que se han construido en España, que no voy a repetir por verguenza propia y ajena. Mientras que aquí nos preocupamos básicamente en saber si el dirigente de turno era del PSOE, PP, CiU, ...; nuestra imagen como país se deteriora a pasos agigantados, y se incrementan las dudas acerca de nuestra seriedad. Por que eso sí, pedimos dinero a Europa, pero ... con chulería y por que nos da la gana.
He querido ilustrar esta entrada con la imagen de la derecha, extraida de una presentación editada hace un año por el Ministerio de Fomento. El coste del Corredor Mediterráneo, en un período de 10 años, es de 53.000 millones de euros. Esto incluye actuaciones ya realizadas y proyectadas, con el objetivo de tener línea de alta velocidad para pasajeros, ancho europeo para mercancías, etc...
Esta cantidad choca con las aportaciones realizadas a Bankia, 23.500 millones de euro, sin debate, sin buscar responsables al desaguisado, sin comisión de investigación parlamentaria, sin explicaciones de nuestro Presidente de Gobierno. O sea que cuando queremos, bien que encontramos dinero.
1 Comentario
Este es uno post.Thanks artículo Awesome Again. Realmente magnífico.
Camilla inversora
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